El guepardo

Guepardo (Aciononyx jabatus)

Descripción:

 El guepardo es muy singular de la familia de los félidos. Presenta muchas características que lo asemejan al perro y que no se encuentran en otros felinos. Tiene las patas largas y está constituido para alcanzar grandes velocidades; es el más rápido corredor conocido.

En los pies tienen almohadillas plantares duras, con los bordes agudos, semejante salas de los perros en lugar de las almohadillas elásticas que presentan el resto de los félidos. Estas almohadillas y las uñas romas y no retráctiles le proporcionan sus habilidades de moverse con tanta rapidez, frenar súbitamente y hacer giros rápidos. 

La cabeza es pequeña en comparación con el resto del cuerpo, y los ojos están situados bastante altos, lo que le sirve de gran ayuda al animal para atisbar por encima de montículos y pequeñas lomas. Las orejas son pequeñas y bastante planas, características que reduce todavía más la silueta del animal. Los conductos nasales son más grandes que en los demás félidos para permitirle conseguir grandes cantidades adicionales de oxígeno para la carrera final hacia la presa.

También lo podemos distinguir de otros felinos por su pelaje con tono rojizo amarillento manchado con lunares negros y las líneas muy marcadas que van desde el ángulo del ojo hasta los lados de la nariz.

Se distribuyen desde Argelia y Marruecos hasta el Transvaal, así como Egipto, Etiopía, Arabia, Siria, Persia y la India.

Tienen fama de ser el animal terrestre más rápido, aunque es muy difícil determinar con toda seguridad su velocidad máxima. Tal dificultad se debe principalmente a la característica (que el guepardo comparte con otros felinos) de ser un corredor de velocidad, es decir, la presa es capturada después de una breve y rápida carrera, y si aquélla elude la captura, el guepardo cesa de perseguirla.

Se conocen dos marcas de guepardos que alcanzaron los 114 km. por hora. En una ocasión, un ejemplar cubrió 640 metros en 20 segundos , y otro, 73 metros en 2 cuartos de segundo.